top of page

Ritmo de vida Siendo PAS






“Siento que todo me lleva más tiempo que a los demás", "me canso muy rápido", "no puedo hacer muchas cosas al mismo tiempo o en un mismo día".


Estas frases que se repiten en mis pacientes, también las he pronunciado yo misma innumerables veces.


¿Es esto cierto?


Personalmente, considero que depende desde qué perspectiva lo veamos.


En lo concreto, pareciera que sí. Tendemos a tomarnos más tiempo para analizar situaciones y resolver problemas, y necesitamos más pausas para regular nuestra energía. Sin embargo, una vez que llegamos a un resultado de la situación, por lo general suele ser más adecuado, profundo y complejo si lo comparamos con lo obtenido por otras personas que no poseen el rasgo. Con esto me refiero a que rara vez necesitamos volver y corregir un proceso cuando lo consideramos finalizado.


La mayoría de las personas resuelve en menos tiempo, pero omite más detalles. Son más prácticas y resuelven más cosas en un mismo día, pero profundizan menos. Se cansan menos, pero procesaron menor cantidad de información. La forma adecuada de proceder siempre dependerá de lo que la situación y las circunstancias ameriten. Por eso es importante reconocer y valorar lo que cada persona tenga para aportar, y conectar desde esas diferencias con una posición constructiva y cooperativa.


Las PAS presentamos una tendencia al perfeccionismo, que necesitamos trabajar para que sea nuestro aliado y no nos juegue en contra. La forma de funcionamiento de nuestro sistema nervioso nos lleva a percibir y considerar gran cantidad de variables al momento de procesar información como también de resolver una situación. Esto, efectivamente, suele llevarnos más tiempo, o un desgaste mayor si necesitamos proceder más rápidamente de lo que preferiríamos. Sin embargo, luego de permitirnos organizarnos a nuestro ritmo, todo fluye más fácilmente y hay menos errores. Además, contamos luego con el aprendizaje adquirido, que será más fácilmente aplicable a situaciones similares posteriores.


La aplicación posterior sucede tanto de forma consciente como inconsciente. Con esto último me refiero a lo que explica la autora Karina Zegers, cuando señala que solemos tener momentos de iluminación en los que se nos presentan ideas creativas o encontramos soluciones de forma repentina a problemas que se nos presentan. Esto se debe al gran caudal de información que recopilamos, lo cual podemos considerar como una valiosa herramienta que surge de este procesamiento profundo de la información. Pero, como consecuencia de esta profundidad, nuestro proceder es más pausado y nos cansamos más fácilmente; asimismo, podemos llegar a estados de sobreestumulación si no aprendemos a gestionar nuestro rasgo.


Estas características forman parte de nuestra naturaleza, por eso es importante conocernos y respetarnos. Darnos los tiempos de descanso que sintamos necesarios. Ante el ritmo de vida que nos propone y, muchas veces exige, nuestra cultura actual, puede ser un gran desafío. Pero es posible. Podemos llevar un ritmo de vida pausado, pero fluido. Y siempre resalto la importancia de que esto sea así, ¿cuán saludable puede ser vivir sin pausa? Los trastornos de ansiedad están a la orden del día, y no sólo para PAS sino para todos. Considero que podemos tomarlo como un llamado de atención para la sociedad en general, y que nosotros podemos ser un ejemplo… si comenzamos por nosotros mismos.



0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page